Unas cuantas veces en mi vida he experimentado momentos de una claridad meridiana. En los que durante unos breves segundos, el silencio ahoga el ruido y puedo sentir en lugar de pensar. Todo parece muy definido, el mundo claro y fresco como si todo acabara de nacer.

sábado


Noto como los tornillos se desprenden lentamente de la abrazadera, la manipulación del tiempo no es una ciencia exacta, como cualquier arte, para cada individuo es personal, ¿y cual es el arte de hacer que mi turno pase tan deprisa? imagino lo contrario, que el tiempo se ha congelado, imagino que el mando a distancia de la vida, esta en pausa.
Dentro de este mundo congelado puedo deambular lentamente, inadvertido, y nadie sabe ni siquiera que el tiempo se ha detenido.

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